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Busquemos Perlas Escondidas de esta semana

Busquemos Perlas Escondidas de Job 25 - 27 | Semana del 11 al 17 Diciembre del 2023

✅✅ Busquemos Perlas Escondidas de Job 25 – 27 | Semana del 11 al 17 Diciembre del 2023 ✅✅

Job 26:14. Aunque sabemos poco sobre lo que Jehová ha creado, ¿de qué nos damos cuenta al observar la creación? (w16.11 9 párr. 3).

Al contemplar la obra de Jehová, nos maravillamos ante su inmensa sabiduría. Como un organizador sin igual, ha dado forma a todo de manera meticulosa y ordenada. La grandiosidad del universo revela su incomparable destreza creativa. Esta evidencia nos invita a reconocer que Jehová ha concebido los cielos y la tierra con profundo discernimiento. En virtud de esta manifestación de sabiduría, surge el motivo para rendirle alabanzas y adoración, así como para mantener una lealtad inquebrantable hacia él.

¿Qué perlas espirituales ha encontrado sobre Jehová, el ministerio y otros temas en la lectura bíblica de esta semana?

Job 26:2, 3. En una disertación final, Job hace callar por completo a sus compañeros (32:12, 15, 16). Dice con mucho sarcasmo: “¡Oh, de cuánta ayuda has sido a uno falto de poder! […] ¡Cuánto has aconsejado a uno que carece de sabiduría!” . No obstante, nada, ni siquiera el Seol, puede ocultar de la vista de Dios lo que sucede. Job describe la sabiduría de Dios manifiesta en el espacio exterior, la Tierra, las nubes, el mar y el viento… todo lo cual el hombre ha observado. Estos son tan solo los bordes de los caminos del Todopoderoso. Son apenas un susurro de la grandeza del Todopoderoso.

Job 26:7. Hace unos tres mil quinientos años, la Biblia ya afirmaba que la Tierra está suspendida “sobre la nada”. Esta afirmación contrasta con los mitos que decían que la Tierra flotaba en el agua o que descansaba sobre una tortuga gigante. Unos mil cien años después de que se escribiera el libro de Job, la gente seguía creyendo que la Tierra tenía que estar apoyada en algo. Hubo que esperar hasta el año 1687, hace tan solo unos trescientos años, para que Isaac Newton publicara sus estudios sobre la fuerza de la gravedad y explicara que una fuerza invisible mantiene la Tierra en órbita. Este importante descubrimiento científico confirmó que lo que la Biblia dijo hace más de tres mil años es verdad.

Job 26:7 La Biblia dice que la Tierra está suspendida en el espacio. No menciona nada parecido a los populares mitos de la antigüedad que decían que el planeta descansaba sobre los hombros de un gigante o sobre unos elefantes apoyados en una enorme tortuga. Fueron los científicos quienes averiguaron cómo se sostiene la Tierra. Nicolás Copérnico y Johannes Kepler plantearon que los planetas giran alrededor del Sol llevados por una fuerza invisible. Unas décadas más tarde, Isaac Newton demostró que la gravedad controla el movimiento de los objetos en el espacio.

Job 26:7-14 Lo que el hombre puede captar por su estudio de la creación material tan solo se aproxima a ‘los bordes de los caminos de Dios’ y no es más que un “susurro” al compararlo con el “poderoso trueno”. Estas expresiones aplican aún más en el caso de las obras de juicio y salvación de Dios, pues sus pensamientos son demasiado profundos para que las personas impías los capten. Sin embargo, el examinar la sabiduría y el entendimiento divinos manifestados en la creación material le permitió a Job discernir su apropiada relación con el Creador y reconocer con humildad su propia falta de entendimiento.

Job 27:5. Pero, incluso en los peores momentos, se negó a darle la espalda a Jehová. Se negó a creer las mentiras de aquellos falsos amigos. Dijo: “¡Ni se piense de parte mía que yo los declare justos a ustedes! ¡Hasta que expire no quitaré de mí mi integridad!”. Con estas importantes palabras, dio a entender que estaba decidido a ser íntegro pasara lo que pasara. Se negó a darse por vencido, y nosotros podemos hacer lo mismo.

Job 27:5. Aunque Job no comprendió todas las cuestiones implicadas, no dejó que sus tres supuestos amigos lo convencieran de que le había fallado a Dios. Sin duda, este relato fortalece nuestra fe y nuestra confianza en que también nosotros podemos serle fieles a Dios y defender su soberanía.

Job 27:5. Job era el único que podía quebrantar su propia integridad, pues el que una persona sea íntegra depende del amor que le tenga a Dios. Por tal razón, es preciso cultivar un profundo amor a Jehová.

Job 25:5 nos enseña que algunas personas pueden intentar hacernos creer que no tenemos valor ante Dios y sugerir que somos impuros ante Él. Es crucial no prestar atención a tales personas, sino recordar siempre que Jehová nos ama y que, a pesar de nuestras imperfecciones, tenemos un gran valor para Él.

Job 25:4 afirma que los humanos no pueden ser justos ante Dios, insinuando que a Dios no le beneficia que le sirvamos. Aunque estas palabras sugieren que no valemos más que un gusano, debemos tener cuidado de no adoptar esta perspectiva. Jehová aprecia y se complace cuando le servimos sinceramente y de todo corazón.

Job 26:1-2 nos enseña que el cristiano amoroso no atribuye los problemas de otros a su responsabilidad. Criticar severamente los errores del pasado, ya sean reales o imaginarios, puede desanimar a quienes luchan por avanzar. En lugar de eso, debemos brindar consuelo y apoyo para ayudarles a superar las dificultades.

Job 26:3 destaca la importancia de tener cuidado con nuestras palabras, ya que estas tienen un gran poder. Jehová nos instruye a utilizar nuestra capacidad de hablar para edificar y beneficiar a los demás. Debemos ser selectivos en nuestras palabras, asegurándonos de que sirvan para construir y no para destruir.

Job 26:4 resalta la necesidad de ser cautelosos al hablar con nuestros hermanos, especialmente si están desanimados. Las palabras que edifican son aquellas que son limpias, amables y verdaderas. Jehová desea que nuestras palabras animen y ayuden a los demás. Aunque pueda ser un desafío, es esencial pensar antes de hablar y esforzarnos por comunicarnos de manera positiva.

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