Estudio de la Atalaya de esta semana

✅✅ Estudio de la Atalaya | Animémonos unos a otros en las reuniones | Semana 26 de Junio al 2 Julio ✅✅

1. ¿Por qué comentamos en las reuniones?

Hay varios motivos por los que comentamos en las reuniones, tal como se mencionan dos en el texto. En primer lugar, al ser bautizados, hemos prometido hacer una declaración pública de nuestra fe, y una de las formas de cumplir con esto es a través de nuestros comentarios en las reuniones, donde alabamos a Jehová en presencia de los demás. En segundo lugar, al expresar palabras de alabanza a Jehová, estamos construyendo y fortaleciendo a nuestros hermanos, animándonos mutuamente, como se nos insta a hacer en Tesalonicenses.

2. ¿Qué oportunidades tenemos de comentar en las reuniones?

Disponemos de diversas oportunidades para comentar durante las reuniones, tanto durante la semana como los fines de semana. Estas oportunidades incluyen el estudio de las perlas escondidas, el estudio bíblico de congregación, diferentes aspectos de nuestra vida cristiana y el análisis de la Atalaya los fines de semana. Durante estas ocasiones, podemos compartir nuestros comentarios y reflexiones, contribuyendo así al enriquecimiento de la discusión y al crecimiento espiritual de todos los presentes.

3. a) ¿Qué posibles obstáculos tenemos al comentar? 

Nuestra personalidad influye en nuestro nivel de extroversión, lo cual puede generar barreras que dificulten o impidan expresarnos, especialmente cuando nos enfrentamos a nervios o miedo. Asimismo, es posible que sintamos el deseo de participar más activamente en las conversaciones, pero no siempre se nos presentan las oportunidades para hacerlo.

3. b) ¿Cómo nos ayuda Hebreos 10:24, 25?

Este texto nos brinda una valiosa lección y nos recuerda la importancia de animarnos mutuamente, sin importar la forma en que lo hagamos. Ya sea a través de un comentario breve y sencillo o aprovechando las oportunidades que se nos presenten para expresarnos, el acto de apoyarnos unos a otros es fundamental.

4. ¿Qué tres ideas analizaremos en este artículo?

En este artículo, examinaremos varias formas de alentarnos mutuamente en una congregación pequeña de hermanos, así como también exploraremos estrategias para hacerlo en una congregación más grande, donde las oportunidades de comentar pueden ser más limitadas. Además, discutiremos cómo nuestros comentarios pueden variar según nuestra personalidad y carácter.

CÓMO ANIMARNOS UNOS A OTROS EN UNA CONGREGACIÓN PEQUEÑA

5. ¿Qué podemos hacer para animarnos si somos pocos en la reunión?

Cuando la congregación es pequeña, el hermano encargado de dirigir el estudio de La Atalaya puede enfrentar dificultades para recibir comentarios. Por lo tanto, es crucial que nos preparemos adecuadamente antes de la reunión, para poder brindar apoyo y fomentar el análisis en el estudio de La Atalaya, tanto para el beneficio de toda la congregación como para glorificar a Jehová.

6, 7. ¿Qué puede hacer para controlar sus nervios?

En primer lugar, debemos ser conscientes de nuestras dificultades, reconocer que podemos ser personas tímidas y experimentar nerviosismo. Una vez que hayamos admitido estas limitaciones, podemos seguir el consejo de Proverbios 21:5 y convertirnos en trabajadores con un plan para superar estos temores y obtener resultados positivos.

Existen varias sugerencias que podemos poner en práctica para controlar nuestros nervios. Una de ellas es prepararnos adecuadamente y tener un control sobre la información que vamos a estudiar. Además, es importante recordar que nuestros comentarios no tienen que ser muy extensos o complicados, sino que pueden ser sencillos, concisos y directos al punto.

Y no debemos olvidar la importancia de la oración a Jehová, siempre debemos pedirle su ayuda. Al encomendarnos a Él, podemos encontrar fortaleza y confianza para superar nuestras limitaciones y enfrentar el desafío de participar en el estudio de La Atalaya.

8. ¿Qué siente Jehová cuando ve que hacemos todo lo que podemos?

Jehová nos conoce en profundidad y es consciente de todos los esfuerzos que cada hermano o hermana está realizando para participar, incluso en aquellas ocasiones en las que puedan sentirse incapaces. Sin embargo, es importante recordar que Jehová no nos exige más de lo que podemos hacer. Él comprende nuestras limitaciones y se siente orgulloso de cada uno de sus siervos por todo lo que están dispuestos a darle.

No debemos sentirnos mal si en algún momento nos encontramos en una situación en la que no podemos contribuir de la manera que deseamos. Jehová valora el esfuerzo y la disposición de corazón que ponemos en su servicio, y eso es lo que realmente importa para él. Sigamos confiando en su amor y misericordia, sabiendo que él nos guiará y nos dará la fuerza necesaria en cada circunstancia.

CÓMO ANIMARNOS UNOS A OTROS EN UNA CONGREGACIÓN GRANDE

9. ¿Qué situación podría surgir en una congregación grande?

En esta situación particular, es posible que nos encontremos en circunstancias en las que tengamos varios comentarios preparados pero no tengamos la oportunidad de compartirlos debido a que no nos vean al levantar la mano o porque se les da la palabra a otros hermanos o hermanas. Es importante recordar que Jehová sabe que hemos estado dispuestos a participar, y también la congregación es consciente de ello. No debemos desanimarnos, ya que incluso al estar dispuestos a alabar a Jehová, ya hemos cumplido con nuestro propósito.

Es comprensible que en nuestra mente imperfecta podamos llegar a pensar que se nos pasa por alto a propósito. Sin embargo, es vital que seamos humildes y compasivos, tanto con nosotros mismos como con los demás. Debemos recordar que nuestras mentes imperfectas pueden crear obstáculos que nos alejen de la verdad o de seguir el camino que Jehová nos ha trazado. Por lo tanto, es esencial mantener la humildad y compasión, valorando las oportunidades que se les brinda a nuestros hermanos y hermanas, y reconociendo que ya hemos dado testimonio a Jehová, incluso si en una reunión en particular no tenemos la oportunidad de comentar.

10. ¿Qué podría hacer para tener más probabilidades de comentar?

Es importante recordar que no debemos permitir que sentimientos negativos, como sentirnos mal o pensar que se nos tiene alguna manía, ocupen nuestra mente en el contexto del pueblo de Dios. En la congregación, no se nos discrimina intencionalmente.

Sin embargo, también es esencial ser conscientes de que nuestros hermanos y hermanas también experimentan el gozo de comentar y participar en las reuniones. Por lo tanto, las oportunidades deben ser distribuidas equitativamente.

Si deseamos tener más oportunidades para participar, es recomendable que nos preparemos con varios comentarios. Además, podemos enriquecer nuestros comentarios al ofrecer información adicional y analizar en profundidad aquellos párrafos que puedan contener verdades bíblicas más complejas. Al hacerlo, demostramos un mayor compromiso y conocimiento en el estudio de la Palabra de Dios.

11. Según Filipenses 2:4, ¿qué podemos hacer?

Filipenses 2:4 nos recuerda que debemos aplicar este principio en el contexto de los comentarios, reconociendo que nuestros hermanos también desean expresarse y que no somos superiores a ellos. Por lo tanto, si todos levantamos la mano, permitimos que nuestros hermanos comenten en algunas ocasiones, mientras que en otras ocasiones nos tocará a nosotros. En la familia de Dios, compartimos la alegría y nos regocijamos al ver la felicidad de nuestro pueblo.

12. ¿Cuál es una buena manera de hacer que los demás se sientan animados en las reuniones? (Vea también la foto).

Una forma positiva de abordarlo, como se muestra en la imagen y se mencionó en el párrafo anterior, es experimentar alegría y felicidad al escuchar los comentarios y las experiencias de nuestros hermanos y hermanas en las reuniones. Sus testimonios nos brindan aliento y sabiduría, y son una valiosa fuente de inspiración tanto para nosotros como para toda la congregación.

13. ¿Qué podemos hacer para que más hermanos tengan la oportunidad de comentar?

Se nos recuerda que nuestros comentarios deben ser concisos, y se sugiere que no excedan los 30 segundos. Además, es una buena práctica evitar mencionar demasiadas ideas para permitir que otros puedan seguir comentando el párrafo. Si nuestro comentario es extenso y abarcamos todas las ideas, se limitarán las oportunidades de análisis adicional por parte de los demás.

14. ¿Qué podemos tener en cuenta a la hora de decidir cuántas veces levantaremos la mano? (Vea también las fotos).

Es importante ser considerados con nuestros hermanos y hermanas en las reuniones. Si ya hemos tenido la oportunidad de comentar y vemos que otros levantan la mano sin haberlo hecho, podemos ayudar al conductor de la reunión al bajar nuestra mano, brindándoles la oportunidad de comentar a esos queridos hermanos, tal como se muestra en la imagen.

Nuestro amor por nuestros hermanos también nos permite ver esta situación desde otra perspectiva. Por ejemplo, si identificamos a hermanos que suelen tener dificultades para comentar o les cuesta hacerlo, y nosotros participamos regularmente, también es una muestra de consideración y amor el bajar la mano, incluso si no hemos comentado, para que el conductor de la reunión pueda dirigirse a esos hermanos y darles la oportunidad de expresarse.

15. a) ¿Cómo deberíamos reaccionar si no hemos podido comentar en la reunión? 

Como se cita en Eclesiastés, como siervos de Dios, no debemos permitir que la ira se apodere fácilmente de nosotros, especialmente en relación al gozo que otros hermanos puedan experimentar al comentar durante las reuniones. Si no tuvimos la oportunidad de comentar, debemos sentirnos orgullosos y felices por nuestros hermanos, en lugar de permitir que la tristeza o la frustración se apoderen de nosotros.

Es importante recordar que cada uno tiene un papel único en la congregación y que las oportunidades para comentar pueden variar. En lugar de enfocarnos en lo que no pudimos hacer, debemos cultivar un espíritu de alegría y satisfacción al ver la participación y el gozo de nuestros hermanos en la reunión.

15. b) ¿Qué debe tener en cuenta el hermano que hace las preguntas? (Vea el recuadro “ Cómo dirigir una sección con preguntas y respuestas”).

Es recomendable que el hermano conductor sea lo más conciso posible en sus intervenciones durante la reunión, de modo que se pueda aprovechar al máximo el tiempo para los comentarios. Es importante dejar espacio para que los hermanos levanten la mano sin necesidad de preguntar quién no lo ha hecho.

Además, es una buena práctica que el hermano conductor se mantenga informado durante la semana acerca de quiénes han comentado, de manera que pueda distribuir los comentarios a lo largo de toda la reunión y estar consciente del tiempo disponible.

De esta manera, se fomenta una dinámica eficiente en la reunión, permitiendo que todos los hermanos tengan la oportunidad de participar y que el flujo de comentarios sea organizado y adecuado en relación al tiempo asignado.

16. ¿Qué podemos hacer para animar a los que hayan comentado?

A todos nos agrada recibir felicitaciones y palabras positivas, ya que nos brindan ánimo y motivación. Por lo tanto, podemos aplicar este mismo principio con nuestros hermanos, animándolos aún más a través de nuestros comentarios y elogios posteriores.

OTRAS MANERAS DE ANIMARNOS

17. a) ¿Qué pueden hacer los padres?

Los padres desempeñan un papel importante al hacer comentarios apropiados para la edad de sus hijos y abordar temas adecuados para su desarrollo. Desde temprana edad, es fundamental enseñarles que no hay nada de malo en levantar la mano si necesitan algo y no lo ven o no se lo proporcionan de inmediato. Es importante transmitirles que el simple deseo y el acto de levantar la mano son suficientes para que Jehová se sienta contento con ellos.

17. b) Según el video, ¿cuáles son los cuatro pasos para preparar un comentario? (Vea también la nota).

Los cuatros pasos para preparar un buen comentario como vimos en el vídeo son: 1). Usar buenos ingredientes, que sean breves acordes a la pregunta, 2). Buscar la respuesta en el párrafo, 3). Hacer apuntes y 4) Ensayar el comentario. Además, podemos preparar varios comentarios y nunca rendirnos, porque el habernos preparado y levantar la mano es como si hubiéramos comentado ya.

18. ¿Qué podemos hacer para no llamar demasiado la atención cuando comentamos? (Proverbios 27:2).

Tienes razón, según el consejo de Proverbios 27:2, es importante tener comentarios personales breves y evitar elogios excesivos hacia nosotros mismos al centrarnos en nuestras propias experiencias. En su lugar, debemos dirigir nuestra atención y reconocimiento hacia Jehová. Aunque es válido compartir nuestras experiencias si la pregunta lo solicita, es fundamental recordar que la gloria y la alabanza deben ser atribuidas a Dios en última instancia.

19. a) ¿Cuál será el resultado si en las reuniones pensamos en los demás? (Romanos 1:11, 12).

Aunque no existen reglas estrictas y escritas al respecto, es cierto que nuestras reuniones pueden ser más animadas y edificantes si adoptamos una actitud empática hacia los demás. Es importante valorar y alegrarnos por los logros y esfuerzos tanto propios como de nuestros hermanos en la labor que han dedicado a Jehová durante ese día de reunión. Al enfocarnos en el bienestar de los demás y apreciar el fruto de su trabajo, creamos un ambiente de alegría y aliento mutuo.

19. b) ¿Por qué le gusta a usted comentar en las reuniones?

A nivel personal, disfruto participar activamente en las reuniones, ya que considero que es una manera de motivar a nuestros hermanos y, al mismo tiempo, expresar mi gratitud y honrar a Jehová por el maravilloso privilegio que tenemos.

¿CÓMO DEMOSTRAMOS QUE SOMOS CONSIDERADOS EN LAS SIGUIENTES SITUACIONES?

Cuando hay pocas manos levantadas.

En el caso de una congregación pequeña, se presentan más oportunidades para participar activamente en los comentarios durante las reuniones. De hecho, es posible que en muchas ocasiones se necesiten comentarios adicionales, por lo que es importante prepararnos de manera aún más exhaustiva para poder ofrecer varias intervenciones cuando sea necesario, con el objetivo de animar y estimular a toda la congregación.

Cuando hay muchas manos levantadas.

Es un gesto de amor y consideración hacia nuestros hermanos cuando, después de haber realizado un comentario, notamos que otros también están tratando de hacerlo o incluso han levantado la mano aquellos a quienes sabemos que les cuesta más participar. En este caso, es apropiado y bondadoso bajar nuestra mano y dar la oportunidad al conductor de la reunión de permitir que estos hermanos expresen sus pensamientos y compartan su punto de vista. Esto promueve la equidad y fomenta un ambiente de apoyo y estímulo mutuo en la congregación.

Cuando preparamos nuestros comentarios.

Es importante tener en cuenta que nuestros comentarios deben ser concisos y centrarse en una sola idea para permitir que otros hermanos tengan más oportunidades de participar. Además, es fundamental que nuestros comentarios resalten a Jehová, su Palabra y su pueblo como prioridad. Esto no significa que no podamos compartir experiencias personales, pero debemos evitar que sean extensas o se centren demasiado en nosotros mismos. En su lugar, debemos enfocarnos en cómo esas experiencias personales están relacionadas con el tema en discusión y cómo reflejan el amor y la guía de Jehová en nuestras vidas. Al hacerlo, promovemos una participación equilibrada y enriquecedora para toda la congregación.